CIPAGEO®: Impermeabilización y Revestimiento
La impermeabilización suele representar un pequeño porcentaje del coste total del proyecto. Sin embargo, la elección equivocada de los materiales para este segmento puede causar daños importantes a un proyecto. La tecnología utilizada en el desarrollo y producción de geomembranas de PVC ha experimentado importantes cambios y mejoras en los últimos años. El uso de nuevas resinas, plastificantes, aditivos y nuevos procesos de laminación y acabado han hecho del PVC una alternativa atractiva y rentable. Estas mejoras de la materia prima han dado lugar a un aumento significativo de la vida útil del producto. Los análisis forenses demuestran que los revestimientos de PVC pueden mantener su resistencia y flexibilidad durante 30 años en determinadas condiciones.
¿Por qué utilizar PVC?
La Geomembrana de PVC, debido a su alargamiento superior al 300% (a un espesor de 0,75 mm) funciona prácticamente dentro de la Ley de Hooke, lo que le permite soportar mayores tensiones causadas por defor-maciones del suelo, ya que se ajusta a la deformación del mismo. En caso de que el suelo se compacte de nuevo, al eliminar la tensión sobre el PVC, la membrana vuelve prácticamente a su estado original. En el caso del polietileno de alta densidad, tiene un punto de transición entre el estado plástico y el estado elástico en torno al 15% de alargamiento. Esto significa que por encima de ese punto el material ya no vuelve a su estado original.
El PVC, debido a su estructura amorfa, no sufre el Agrietamiento por Esfuerzo Ambiental, mientras que el Polietileno de Alta Densidad, debido a su estructura cristalina, sufre este fenómeno.
La E.P.A. - Environmental Protection Agency of the United States - recomienda el uso de un espesor mínimo de 30 mil (0,76 mm) para una geomembrana de PVC y de 60 mil (1,52 mm) para una geomembrana de Polietileno de Alta Densidad. Por consiguiente, la repercusión en los costes de adquisición de material es significativa.
Además, el PVC es una geomembrana fácil de transportar, almacenar y manipular. El PVC también puede soldarse en fábrica y convertirse en paneles, cuyo tamaño puede alcanzar los 3.500 m² para un solo panel. El usuario/instalador obtiene un beneficio inmediato por la reducción de costes de mano de obra en el campo, energía y transporte. Nuestra experiencia sobre el terreno demuestra que veinte trabajadores, en un turno de 8 horas, pueden instalar hasta 24.000 m²/día de paneles de PVC, sin aumentar el coste total del trabajo. Esta cifra, por ejemplo, para el polietileno de alta densidad texturizado, es de 14.000 m²/día*.
* Análisis interno de Cipatex